Hasta hace unos años se pensaba que la adolescencia es esa fase entre la niñez y la madurez que empieza alrededor de los 12 años y termina sobre los 18, ahora, en el siglo XXI, las circunstancias han cambiado.
El presentador de un programa de radio estadounidense, Jonathan Schwartz, comentaba en su programa, que ahora la adolescencia terminaba aproximadamente a los 32 años.
Roger Cohen periodista de The New York Times, ha dado un paso más y ha desarrollado la teoría de la «curva de inversión sofisticación-madurez», su desarrollo es muy sencillo y muy claro: cuanto más sofisticado es un adolescente menos maduro es.
Como que gran parte de esos conocimientos los han adquirido frente a la pantalla del ordenador, que es el sitio donde estudian, se relacionan, flirtean, escuchan música y compran; no han desarrollado las aptitudes que se aprenden a través de la interacción personal.
Si la madurez conlleva la adquisición dolorosa de conocimientos a través de la experiencia, la omnipresencia del mundo virtual la esta retrasando. De hecho se esta alargando por ambos extremos, con una niñez reducida por la sofisticación mencionada y una edad adulta aplazada.
Aparece también el fenómeno del hombre-niño. Son hombres entre 25 y 40 años, atrofiados desde el punto de vista emocional. Han aplazado todas las responsabilidades no relacionadas con el trabajo – incluidas las relaciones y el matrimonio – por considerarlas una carga demasiado pesada para una niñez de hombre adulto.
Por supuesto que todo esto no son más que teorías, pero seguro que todos conocemos a alguien que encaja con estos comportamientos.
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Yo tengo 31 y me comporto como niño este wey si que tiene razon.
Dice mi mama que solo existen dos tipos de niños: Los que tienen dinero, y los que no lo tienen! Esto en alucion a que todos los hombres somos niños, la diferencia estriba en que los adultos tenemos dinero para comprarnos nuestro juguetes.
A mis 43 años me siento bien con mi niño interior, juego mucho con mis pequeños niños, t a la hora de comprar juguetes siempre me hacen el reclamo de por que yo me compro dos o uno mas caro.
Esta situacion me hace hace muy feliz, me divierto y me la paso muy bien, pero no eludo mis responsabilidades como adulto. en esta sociedad moderna todo esta cambiando, la forma de relacionarse es muy diferente a como era hace 30 años, los jovenes de hoy en dia son mas practicos a la hora de decidir que van a hacer con su vida, de tal manera que retrasan o evitan ciertas situaciones que antes se nos imponian de manera social.
El materialismo y capitalismo tambien hacen que las parejas eviten tener hijos, o lo retrasen al maximo, todo con el afan de tener mas tiempo y dinero para si mismos.
La cuestion va a ser como va esto a cambiar el concepto de familia que tenemos hoy en dia.
No creo que se esten refiriendo a la niñez como sinónimo de juego, algo que todos tenemos que tratar de matnener el mayor tiempo posible, sino a como sinónimo de una carencia de aceptación de las responsabilidades que implica crecer. Hay una frase que resa «Envejecer es obligatorio, crecer es opcional», y el crecimiento no se define como el incrementar centimetros o acumular años, sino a un crecimiento interior que te permite relacionarte con el mundo en el que vives. No esta mal tener juguetes, del costo que sean, tampoco pasarsela detras de una computadora, lo que quizá se pueda identificar como problemático, sería el eludir la responsabilidad emocional que tenemos con nuestros allegados y con nosotros mismos, utilizando nuestros «juguetes» como excusa para evitar relacionarnos con el mundo a través de el contacto directo y la experimentación y obtención de experiencia
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O simplemente es mas satisfactorio hacer lo que te da la gana y no ser el perro de ninguna arpía manipuladora…