Ante la noticia del experimento con 800 hormigas que se esta realizando en la estación espacial ISS, y viendo las fotos y el texto que podeis ver siguiendo el link, no he podido sino recordar el episodio de los Simpson, donde Homer consigue formar parte del programa espacial y ser lanzado al espacio exterior para aumentar la depauperada audiencia televisiva de las misiones de la agencia espacial NASA.
En la misión, sucede un incidente con las hormigas que acaba con un experimento, parecido al que ahora han diseñado para la ISS, consistente en descubrir como se adaptan las hormigas a la ingravidez y de ello sacar conclusiones útiles para el diseño de nuevos mini robots que busquen sus propios recursos en situaciones extremas. ¿WTF?
Permitidme que os diga que el calvo de la foto, tiene todos los números para repetir la cagada de Homer y devolver la libertad a esa colonia de hormigas en medio del espacio. Aunque será una libertad alejada de los estándares que nuestras pequeñas amigas podrían esperar. En cualquier caso, veamos la secuencia de los hechos…
No se porque me gustan las hormigas. Supongo que representan un refugio mental, unas vacaciones temporales de la realidad que me rodea en un macrocosmos de seres que conviven con nosotros. viven en sociedad y van a lo suyo sin importarles nada de nuestro universo. Muy probablemente, nos sobreviviran cuando hayamos acabado con el planeta.
Aqui os dejo un post del magnífico blog historias de hormigas que Jose Maria Gomez Durán alimenta desde Madrid con historias que os dejarán asombrado. Para los aficionados a las hormigas es todo un descubrimiento. Sus videos, investigaciones y aporte al conocimiento de estos insectos son todo un hallazgo.
Esta pequeña y velocísima avispa neoneurina de apenas 2 mm, parasitoide de obreras de la hormiga Cataglyphis ibericus –que describí con el profesor Achterberg en un reciente artículo– ha sido elegida entre las diez especies más singulares o raras descubiertas a lo largo del año 2011. La elección ha corrido a cargo del Instituto Internacional para la Exploración de Especies (IISE), de la Universidad estatal de Arizona, y un variado elenco de científicos que hizo la selección entre 200 especies candidatas de un total de 18000 descritas en 2011.
Esta lista de 10 especies se da a conocer, desde hace varios años, cada 23 de mayo coincidiendo con el aniversario del nacimiento de Linneo. Pretende ser una llamada de atención sobre la necesidad de seguir explorando y conservando la riquísima biodiversidad de nuestro planeta.
Ha sido una noticia inesperada y sorprendente. Esta nueva avispilla la encontramos a 80 metros del despacho que ocupo en mi centro de trabajo de Madrid. Las observaciones sobre su comportamiento ovipositor las llevamos a cabo durante mes y medio, en las horas caniculares del verano, en un erial de 100 metros cuadrados. Todo era minúsculo, reducido, limitado. Y todo acontecía a velocidad de vértigo: 5 centésimas de segundo tardaba Kollasmosoma en inyectar su huevo en el gastro de Cataglyphis. Allí, en el erial, esta avispa parasitoide mostraba, es verdad, morfologías y comportamientos insospechados surgidos hace millones de años en su interacción ininterrumpida con la hormiga parasitada.
Cuando ocho extrañamente cabezonas hormigas soldado se habian convertido en una colonia silvestre en Long Island, NY, los científicos sabían que habían encontrado algo interesante.
Este descubrimiento, de estas versiones de gran tamaño de las hormigas soldado, cuyo trabajo es defender el nido, animó a los investigadores a crear sus propias hormigas supersoldado en el laboratorio con la ayuda de una hormona, y, al hacerlo, ofrecer una explicación de cómo las hormigas, y posiblemente otros insectos sociales, tratan de formar hormigas específicas para cada puesto de trabajo dentro de sus colonias.
Resulta que estas hormigas soldado anormales, son el retroceso a un estado ancestral, que ya no se presenta dentro de su especie, excepto, al parecer, por accidente. Este fenómeno de vez en cuando aparece en otras especies, en forma de ballenas teniendo miembros que sus ancestros perdieron o pollos de gallina con dientes o incluso seres humanos nacidos con cola. [10 extremidades y los órganos vestigiales]
«Se ha sabido desde hace mucho tiempo que este tipo de saltos evolutivos se producen, y son vistos como bromas de la evolución», dijo el investigador principal del estudio Ehad Abouheif, catedratico de Investigación en biología del desarrollo evolutivo de la Universidad McGill de Canadá . «Lo que estamos mostrando por primera vez es que existe este potencial ancestral dormido allí, y que cuando es provocado por el entorno o medio ambiente se puede dar rienda suelta a esta capacidad, potenciando la evolución.»
Conozca a los supersoldados
Las especies recolectadas en Nueva York, Pheidole morrisi, normalmente tienen dos tipos de hormigas obreras, de acuerdo con Abouheif: trabajadores regulares, que son responsables de alimentación, lactancia, la alimentación de huevos y larvas, y el cuidado de la reina, y las hormigas soldado, que defienden el nido y usan sus mandíbulas grandes para romper las semillas cosechadas por los trabajadores regulares.
Esta especie no tiene supersoldados, pero los especimenes de cabeza grande se parecían a las hormigas supersoldado que se encuentran entre las ocho especies de hormigas presentes en el suroeste de Estados Unidos y norte de México. Las nueve especies pertenecen al género Pheidole, que contiene alrededor de 1.100 especies.
Así que tiene sentido que las supersoldados fuera de lugar podrían revelar algo sobre el origen de supersoldados entre las otras ocho especies.
Hacer un supersoldado
Para averiguarlo, los investigadores, dirigidos por Rajendhran Rajakumar, un estudiante de doctorado en el laboratorio de Abouheif, observaron el desarrollo de las larvas de supersoldado de dos de las ocho especies que normalmente los producen. (Los investigadores querían estudiar el comportamiento de la morrisi P. que habían recogido, pero estas perdieron la vida en el laboratorio victimas de otras hormigas.)
La casta de una hormiga, o su papel en la colonia, se determina por medio de interruptores del medio ambiente o períodos del desarrollo de las larvas cuando se es receptivo a ciertos estímulos ambientales. Las hormigas adultas en la colonia pueden manipular estos modificadores, por ejemplo mediante la aplicación de ciertas hormonas llamadas feromonas en las fases de desarrollo de las larvas.
En el primer período de desarrollo, este parámetro determina si el huevo se convertirá en una reina o en un trabajador y un segundo interruptor determina si la larva se convertira en un soldado o en un trabajador regular.
Justo antes del segundo interruptor, se aplica un producto químico que actúa como hormona juvenil para las larvas de tres especies que no producen supersoldados. Esta hormona juvenil está involucrada en la traducción de señales ambientales, como la nutrición, en la identidad de las larvas. Al aplicarla de manera artificial, los investigadores no sólo han empujado a las larvas más allá del umbral en el que normalmente se convertirían en soldados regulares, sino más allá de un segundo umbral, normalmente oculto, para la creación de hormigas supersoldados.