The Manhattanhenge marvel in New York City.

 

Manhattanhenge, también llamado el Solsticio de Manhattan, es un fenomeno que ocurre tres o cuatro tardes al año en Manhattan (New York) cuando el Sol en la hora del ocaso se alinea perfectamente con las calles de Manhattan en sentido este-oeste, estas se iluminan lentamente por la bola solar antes de ocultarse, entonces ocurre un efecto parecido al del monumento megalítico de Stonehenge (Inglaterra), donde el Sol también se alinea con las piedras todos los solsticios.

El Manhattanhenge es un fenomeno casi mistico que atrae tanto a neoyorquinos como a visitantes. En el año 2014 se pudo ver entre el 28 y el 30 de Mayo, los mejores lugares para verlo y fotografiarlo son las calles 14, 23, 34 y 42. Estas fotos estan tomadas desde el viaducto de Park Avenue sobre la calle 42, al estar a tres o cuatro metros sobre el nivel de la calle permite una buena visibilidad siempre que puedes colocarte en primera fila y amarrarte a la barandilla ya que la lucha por las primeras posiciones es dura. En las fotos pude apreciarse como mucha gente invade la calle y entre los coches contempla la maravilla.

The Chrysler Building. New York City.

 

El edificio Chrysler ( Chrysler Building ) es un rascacielos art decó situado en el lado este de Manhattan (Nueva York, Estados Unidos), en el 405 de la Avenida Lexington y en la intersección de la Calle 42. Se ha convertido en un símbolo distintivo de la ciudad. Con sus 319 metros  de altura, fue el edificio más alto del mundo durante 11 meses, hasta que fue superado por el edificio Empire State en 1931. Construido originalmente por la corporación Chrysler, el edificio es actualmente copropiedad de TMW Real Estate (75%) y Tishman Speyer Properties (25%). El edificio Chrysler fue diseñado por William Van Alen, el contratista William H. Reynolds y posteriormente vendido a Walter Percy Chrysler como sede central para su compañía.

En los años más recientes, el edificio Chrysler ha seguido siendo uno de los favoritos de los neoyorquinos. En verano de 2005, el Museo de Rascacielos de Nueva York escogió a cien arquitectos, constructores, críticos, ingenieros, historiadores, y eruditos, entre otros, para que eligieran a sus 10 rascacielos favoritos entre los 25 de Nueva York. El edificio Chrysler quedó en primer lugar, ya que el 90 % de los elegidos colocó el edificio entre sus 10 edificios favoritos de Nueva York.

Fuente: Wikipedia

 

 

McSorley´s Old Ale House, New York City. Historia y cervezas a pares.

El McSorley’s Old Ale House es la taberna irlandesa más antigua de Nueva York, se inauguró en el año 1854. Situada en el East Village, Manhattan, fue uno de los últimos bares de EEUU en donde sólo permitían la entrada a los hombres, en 1970 fue obligada por la ley a cambiar esta regla.
Todo el local es historia viva, por aquí pasaron presidentes como Abraham Lincoln, Ulysses S. Grant o Roosevelt . En sus paredes podemos ver viejas fotografías, recortes de periódicos, cuadros y una bandera, también sus dos lemas, el primero es «We were here before you were born» traducido: “Estábamos aquí antes de que nacieras” y el segundo «Be good or be gone» que viene a decir: “Se bueno o vete” , cuando las mujeres aún no eran admitidas su máxima era: «Good Ale, Raw Onions and No Ladies»: “Buenas Ale, cebollas crudas y no mujeres”.

Este es de los sitios que salvo que lo conozcas o estés en New York el tiempo necesario para profundizar en las guías de viaje cometerás el error de pasarlo por alto, el sitio merece una visita o más. En la tarde un gran ambiente, lleno a tope, risas, canticos y gritos, si quieres tranquilidad este no es el momento, el barman nos colocó en una mesa ocupada por un grupo que rápidamente nos invitaron a participar de su juerga, los neoyorkinos son en general muy amigables. Por la mañana a la hora de comer el ambiente es más tranquilo, puedes escoger mesa, no hay cantos ni gritos y las conversaciones son tranquilas.

No es un local para las exquisiteces culinarias, la oferta es limitada, para beber lo típico es escoger entre dos tipos de cerveza: rubia o negra servidas siempre de dos en dos en pequeñas jarras, para acompañarlas podemos picar un plato de queso cheddar con rodajas de cebolla, Leberwurst (embutido muy típico de la cocina alemana ), hamburguesas, galletas saladas y mostaza caliente a discreción, esta comida que a priori no parece muy apetitosa, sabe a gloria después de las primeras cervezas, cuando el cuerpo pide algo sólido para pasar a las segundas y terceras rondas de la suave pero estimulante “Ale”.

El personal es amable pero de pocas palabras, acostumbran a dejar las birras y platos en la mesa de manera ruidosa, el suelo de todo el local está recubierto de una gruesa capa de serrín para no resbalar, no hay televisión ni música, los urinarios son muy antiguos, tal vez podría decir sin miedo a equivocarme que he meado donde meó Abraham Lincoln.

 

Háganme caso si van a New York no se pierdan esta joya, vayan una tarde, den un salto en el tiempo y tómense unas cervezas.

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Tormenta en Barcelona.

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En febrero de este año se combinó un  día de epatante sol con una tormenta en ciernes. Una premonición de lluvia que no cuajó. Un atisbo de lo que se nos venia encima allí, en el horizonte y que presagiaba humedades que luego cayeron en las semanas posteriores, en Marzo.

Una formación nubosa cargada de negros nubarrones oscurecieron el cielo y nos dejaron su señal de atención. Nada es inmutable.

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Museo de las Culturas del Mundo. Barcelona 2015.

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Nuevo museo de las Culturas del Mundo, en la calle Montcada que pasito a pasito alberga una notable colección de bellos espacios dedicados a museos de un interés notable. Al menos a mi me gusta la zona para pasear entre turistas del Picasso y despistados del MEAM que como ya explique, vale mucho la pena. No es la isla de los museos de Berlin, pero no esta mal el sitio.

Ahora abren los palacios Nadal y Marqués de Llió para albergar unos eclécticos ejemplos de culturas del mundo, desde mascaras guineanas a obras del Tíbet, India, pasando por la Polinesia y Japón y algunos remotos lugares mas. Sin duda no es el Metropolitan, pero que mas da, si esta en Barcelona y es gratis hasta el 4 de Abril…

Recomendable pasar un par de horas. Lo fotografié casi todo, aprovechando que nadie molestaba con eso de que no se puede hacer fotos. Todo con la Ricoh GR y modo macro. Casi todo quedo enfocado y me fue mejor que con el MNAC del que no guardo buen recuerdo fotográfico. Recordad, modo macro cuando hagas fotos mas cerca de un metro.