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Si estabas vivo en los 80’s, esta novela te va a encantar. Si además, jugaste y trasteaste con consolas, spectrums, comodores y juegos de aquella época, también te emocionará. Y si eres uno de esos geeks que siempre jugó con ordenadores, si estos aparatos forman parte de tu ser para siempre jamás, entonces, no te la puedes perder.
¿Eras un asiduo de los salones recreativo de aquella epoca? ¿eras fan de las maquinas en los bares y en los pubs? ¿eras un crack jugando a los asteroides como yo y perdías tu juventud y fortuna, machacando joysticks y cargando cassetes de micromania en el spectrum? ¿Acabaste el Monkey Island? Porque esta novela va de eso. Y es como revivir la historia de mi puta vida.
Que alguien nos saque del armario y nos convierta en cultura pop es realmente grande. Somos aquellos frikis fracasados que nunca acabamos los estudios, porque preferíamos trastear con videojuegos, con consolas y tragaperras, siempre denostados por nuestros padres y que aun asi, hicimos de nuestra capa un sayo, y seguimos jugando y jugando hasta hoy. ¡¡ Esta novela esta hecha en nuestro honor !!.
Se lee en un suspiro. No es la gran novela con mayúsculas de nuestro tiempo, pero te entretendrá y no podrás dejarla hasta que te la acabes. Sin duda, la mejor novela de ciencia ficción nueva (ya hacia años que no leía nada nuevo. Solo clásicos que ya conocía), de los últimos tiempos.
Y el Spielberg se ha hecho con los derechos. Y habrá película para el 2018. Seguro que prepara algo grande y de verdad que la historia lo merece. Para ser la opera prima de Ernest Cline, no pasa desapercibida. Os diré que uno de los juegos que aparecen en la novela, La Justa, nos tuvo colgados a un colega tristemente desaparecido y a mi, durante meses, cuando tendríamos poco mas de 20 años.
Que aquello forme parte de esta historia, es todo un detalle. O sea que seguro que los gamers de todas las épocas os veréis reflejados. No os la dejéis escapar porque pocas veces una novela refleja tan bien a toda una generación. Y la realidad virtual, que es el eje de la trama, llama a la puerta por fin.
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