«Hinter jeder der fast bissig hervorgeschleuderten Fragen stand jetzt das fallbeil. Ich wurde unruhig. Diese erste Vernehmung dauerte dreizehn Stunden.»
«Detrás de cada una de las preguntas, casi mordiendo arrojadas, ahora estaba la guillotina. Yo estaba inquieto. Este primer interrogatorio duró trece horas.»
Sobre los antiguos terrenos donde se levantaba la sede de la Gestapo en Berlin hoy se rememora en este museo el terror y el miedo que rodearon aquellas instalaciones. Es dificil de imaginar lo que significó aquello. Solo podemos intuir el regimen de terror impuesto por el partido nazi, que llevo a toda una sociedad a convertirse en el regimen totalitario conocido como el tercer reich.
Todo el miedo y pavor que allí se sufrió. Las torturas que se cometieron. La depravacíon moral y el terror en grado sumo que se ejerció sobre las victimas del regimen, estan plasmados en una magnifica exposición que no te deja indiferente.
Los alemanes expían sus pecados día tras día, año tras año. Con la entereza que les lleva a no esconder en un armario la multitud de cadaveres de su historia. Para ejemplo de proximas generaciones. Como testimonio y homenaje a las victimas. Como recordatorio de los genocidios que se cometieron.
Cualquier alemán de hoy en día conoce lo que ocurrió y lo tiene presente en su memoria. Ellos no estan orgullosos de su pasado, pero cada dia trabajan juntos para que jamas vuelva a ocurrir algo parecido.
Me pregunto, si en España podremos ver alguna vez un museo como este. Un lugar donde las victimas de la guerra civil, sean recordadas y homenajeadas. Donde, los episodios de nuestra contienda sean mostrados en toda su crudeza. Para salvaguardar la memoria de las asesinados. De los torturados y masacrados. Para que nuestros hijos, conozcan la verdad.
Aqui, los criminales de guerra siguen impunes. Las delitos cometidos siguen silenciados. Los cadaveres permanecen escondidos en las cunetas. Y medio pais, sigue pensando que aquellos fascistas asesinos nos trajeron paz y prosperidad. Y así nos va…